Con el rápido avance de la competencia moderna en tecnología de la información, muchos radios RF se están utilizando simultáneamente dentro de una sola banda de frecuencia (un ejemplo típico es la banda VHF). La interferencia mutua de las señales de RF entre estos radios solo se puede mitigar utilizando filtros de salto de frecuencia de banda estrecha de alto rendimiento.

Cuando se utilizan en sistemas receptores, la capacidad de rechazo fuera de banda del filtro de salto de frecuencia de banda estrecha determina en gran medida la sensibilidad de todo el sistema de comunicación del receptor. En sistemas de transmisión, estos filtros ayudan a suprimir la interferencia radiada de las señales de intermodulación en el transmisor.

Un filtro de salto de frecuencia típico consta de cinco componentes:

A medida que las señales electromagnéticas se vuelven cada vez más densas y complejas, los usuarios exigen capacidades de antiinterferencia más altas para el equipo de contramedidas de comunicación. Las radios de salto de frecuencia, como una nueva generación de equipos de contramedidas de comunicación, poseen fuertes capacidades de antiinterferencia y antirrecolección, mostrando ventajas significativas en la guerra electrónica moderna.

Los filtros de salto de frecuencia de modulación digital son un componente crítico diseñado específicamente para esta nueva generación de equipos de contramedidas de comunicación. Estos filtros se colocan en el extremo frontal del receptor o del amplificador de potencia del transmisor (los filtros de salto de frecuencia de alta potencia se colocan después del amplificador de potencia).

Su propósito es lograr la separación de canales, prevenir el bloqueo y suprimir las señales electromagnéticas no deseadas. Como resultado, desempeñan un papel decisivo en la determinación de indicadores de rendimiento críticos del equipo, como la sensibilidad, la figura de ruido y el rechazo de frecuencia intermedia (IF) e imagen.